Carrera espacial
China lanzó ayer con éxito un cohete que pondrá en el espacio a tres tripulantes, uno de los cuales tiene previsto realizar la primera caminata espacial de ese país, en lo que representa la misión espacial más difícil para la nación asiática desde que envió a un astronauta a la órbita terrestre por primera vez en el 2003.
Cohetes ''Larga Marcha II-F'' propulsaron la nave espacial Shenzhou 7, con la tercera misión tripulada de China, que despegó bajo los claros cielos nocturnos del noroeste chino. La caminata espacial está prevista para hoy o mañana.
El presidente chino y jefe del Partido Comunista Hu Jintao apareció en vivo en la televisión estatal elogiando a los astronautas en el sitio del lanzamiento cerca de la ciudad noroccidental de Jiuquan.
''Ustedes definitivamente lograrán esta misión gloriosa y sagrada. La patria y el pueblo están esperando su retorno triunfante'', les dijo Hu a los tres tripulantes, quienes vestían sus trajes de vuelo y estaban detrás de un vidrio para evitar contaminación por gérmenes.
La misión, que se espera dure entre tres y cuatro días, estará casi totalmente consagrada a la caminata espacial, conocida formalmente como actividad extravehicular. Se espera que esta tarea le ayude a China a dominar la tecnología necesaria para crear su primera estación espacial en los próximos años.
La caminata depende de cuán bien se adapten los astronautas a la falta de gravedad y a otras demandas físicas de su ambiente, según la Oficina de Ingeniería de Vuelos Espaciales Tripulados de China. Los astronautas regresarán poco después a la Tierra, agregó.
Los dos astronautas que llevan trajes espaciales adecuados para la caminata serán apoyados por expertos rusos a lo largo de la misión. Sólo uno dejará el módulo orbitador para recuperar experimentos científicos en el exterior de la nave. Uno de los astronautas que podría realizar la caminata lleva un traje espacial Feitian de manufactura china, mientras el otro lleva uno de fabricación rusa.
La misión que partió anoche desde el noroeste de China es la más difícil desde que el país ingresó en el 2003 al exclusivo club de los viajes espaciales tripulados.
El país asiático se encuentra aún a décadas de distancia tecnológica de Rusia y EEUU, que iniciaron sus primeros vuelos tripulados en los años 60 del siglo XX, dijo ayer la agencia EFE.
Sin embargo, mientras los programas espaciales de Moscú y Washington se ven frenados por razones presupuestarias, China ha convertido su conquista del espacio en uno de sus objetivos científicos prioritarios.
